Autorizan a psicólogos a desarrollar sus actividades en el AMBA

El Gobierno nacional autorizó hoy a los psicólogos a desarrollar sus actividades en el ámbito del Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), bajo las recomendaciones sanitarias dispuestas para evitar la propagación de la pandemia del coronavirus.

Así está establecido en la Disposición Administrativa 1533/2020 publicada hoy en el Boletín Oficial, que lleva la firma del jefe de Gabinete, Santiago Cafiero; y del ministro de Salud, Ginés González García.

La autorización abarca a los 35 partidos de la provincia de Buenos Aires comprendidos en AMBA, conforme a los protocolos aprobados por la autoridad sanitaria nacional.

En la norma se aclara que los desplazamientos de los profesionales «deberán limitarse al estricto cumplimiento de la actividad exceptuada».

En tanto, la provincia de Buenos Aires deberá dictar las reglamentaciones necesarias y se establece que el gobernador Axel Kicillof podrá implementarla gradualmente, suspenderla o reanudarla, en virtud de las recomendaciones de la autoridad sanitaria local, y conforme a la situación epidemiológica y sanitaria.

Las personas autorizadas deberán tramitar el “Certificado Único Habilitante para Circulación-Emergencia Covid 19″, en tanto que quienes concurran a los consultorios deberán circular con la constancia del turno otorgado para su atención.

Por su parte, el Gobierno de la provincia de Buenos Aires publicó en el Boletín Oficial del distrito el protocolo para que los psicólogos puedan atender en el contexto del aislamiento.

Lo hizo a través de la resolución 1379 publicada hoy en el Boletín Oficial del distrito, donde se establece que la atención presencial en consultorio es «excepcional» por lo que deberá privilegiarse siempre la consulta remota.

Los turnos para la atención presencial deberán darse de modo espaciado entre uno y otro «a fin de evitar aglomeraciones»; se determina que se deberá respetar la distancia entre paciente y terapeuta, la que deberá ser mayor a 2 metros; y se recomienda que la vestimenta de trabajo sea «exclusiva para la jornada laboral».

También se plantea que se deberá evitar que los pacientes concurran acompañados, «excepto niños o pacientes que por situación excepcional requieran acompañamiento»; se determina que el profesional deberá usar cubrebocanariz; y tendrá que llevar un registro de los pacientes atendidos para su eventual uso en el rastreo de contactos.

Entre las medidas de higiene y seguridad, se sugiere «facilitar en el consultorio y baño alcohol en gel agua, jabón y toalla de papel al paciente»; se propone una limpieza y desinfección de superficies con agua y lavandina, así como con 70% de alcohol etílico y 30% agua en un rociador en mobiliario y picaportes después de la atención de cada paciente».

El protocolo plantea que al ingreso al consultorio se deberá disponer de un trapo de piso para la higiene de la suela del calzado, «permaneciendo embebido en una solución desinfectante de agua y lavandina a concentraciones recomendadas».

Los psicoanalistas tendrán que ventilar los ambientes entre pacientes, con apertura de puertas y ventanas, que produzca la circulación de aire en forma regular y reducir el mobiliario de consultorios y salas de espera retirando revistas, material de lectura, almohadones, alfombras o juguetes.

Por último, se establece que los psicoanalistas deberán exigir a los pacientes medidas de seguridad sanitarias.

Télam