Juan Darío Sanabria Báez se presentó en la comisaría de Cuartel V para denunciar que su mujer era víctima de un secuestro extorsivo. Ante la presión de la Policía se quebró y confesó que la había matado. La víctima se llamaba Nilda Rosa González Ojeda. Tenía 29 años y cinco hijos. El asesino desmembró el cuerpo y arrojó la cabeza y el torso en Francisco Álvarez. Los miembros superiores e inferiores los habría tirado en el pozo ciego de la casa familiar. Está detenido. Horror.
La cabeza y el torso de Nilda Rosa González Ojeda fueron encontrados en un descampado ubicado sobre la mal llamada avenida San Fernando del barrio El Quijote de Francisco Álvarez. No fue azaroso. La Policía llegó con el dato preciso. En el lugar trabajaron los peritos de la Policía Científica.
Horas antes, pasado el mediodía de este viernes 20 de enero, un sujeto se presentó en la Comisaría 4º de Moreno (Cuartel V). Denunció que su pareja, madre de sus cinco hijos, era víctima de un secuestro extorsivo. Declaró que había recibido un llamado de los delincuentes exigiéndole una fuerte suma de dinero, caso contrario la iban a matar. El relato no tenía sustento. Él albañil, ella ama de casa. Sin antecedentes por delitos y con una vida relativamente tranquila.
La historia no se sostuvo. Ante la presión, Juan Darío Sanabria Báez de 36 años se quebró. Y contó la verdad. Había asesinado a su mujer en algún momento entre la noche del jueves y la madrugada del viernes. Todo parece indicar que la atacó a golpes. Luego, en el baño, la descuartizó. La escena del crimen fue la casa familiar ubicada sobre la calle Azteca, a 200 metros del cruce con la calle General Fructuoso Rivera. La urbanización, realizada por los mismos vecinos, es una ampliación del barrio La Gloria II.
En colectivo, dentro de una mochila, habría llevado la cabeza y el torso hasta el campo en El Quijote. Brazos y piernas los habría arrojado en el pozo ciego del predio, que compartían con los padres y un hermano de Sanabria Báez. El resto de la familia sería ajenos a todo este horror. Bomberos Voluntarios y especialistas de la Policía Científica trabajaron durante la madrugada de este sábado en el lugar, pero no hallaron nada. Retomarán la tarea, con el apoyo de un camión atmosférico ya con la luz del día. Estuvo presente personal de la DDI de Moreno y General Rodríguez y también funcionarios de las secretarías municipales de la Mujer y de Seguridad.
La víctima fue identificada como Nilda Rosa González Ojeda de 29 años de edad. Junto con Sanabria Báez habían llegado de Paraguay hace unos diez años. Tienen cinco hijos en común. Tres nenes de 14, 11 y 9 años. Las nenas son las más pequeñas. Tienen 4 y 2 años. No trascendió donde estaban en momentos del femicidio.
El reconocimiento de culpabilidad de Juan Darío Sanabria Báez no tiene validez legal porque fue ante la Policía. No está de más aclarar que está detenido. El domingo será indagado por la justicia.
Los operativos fueron comandados por un joven funcionario dependiente de la UFI Nº 3 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez a cargo de la Dra. Luisa Pontecorvo. El móvil de la locura habría sido una supuesta infidelidad. La carátula del expediente es “Homicidio agravado por violencia de género y por ser cometido por un hombre contra una mujer”. La pena es prisión perpetua.