Una denuncia terminó con el allanamiento a un desarmadero clandestino, varios aprehendidos –entre ellos quien estaría a cargo del lugar- y el secuestro de autopartes de al menos 22 vehículos, muchos de ellos se determinó que habían sido robados en la zona oeste. Los investigadores sospechan que este predio en Paso del Rey es parte de una red delictiva, por lo cual la pesquisa continúa.
Tras la pista de un desarmadero en la zona de Moreno iba personal de la DDI de Moreno y General Rodríguez. La investigación tenía varias denuncias, algunas de ellas realizadas desde las secretarías de Seguridad de los municipios de Moreno y General Rodríguez. Una alerta se recibió durante la mañana de este miércoles 20 de enero: apuntaba a que en las inmediaciones del Río Reconquista en Paso del Rey estaban desarmando vehículos. “Cortando”, como se define en la jerga delictual este tipo de tareas.
A la zona fueron los Policías. Interceptaron una camioneta Ford F100 con dos sujetos en el interior que transportaba partes de un Peugeot 308. Ambos individuos tienen domicilio en Rafael Castillo –partido de La Matanza-. El operativo se armó a unas tres cuadras del lugar que los investigadores presumían que podía encontrarse el desarmadero.
Ya con los datos que confirmaban la presunción, el fiscal Federico Soñora –UFI Nº 4 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez- autorizó un allanamiento de urgencia. Cuando los uniformados estaban llegando, dos personas intentaron escapar, pero fueron apresadas. Uno de ellos es sindicado como el responsable del lugar, de 34 años.
El predio está ubicado en el camino de la Ribera entre Merlo e Independencia, frente al Río Reconquista, en el casco céntrico lado norte de la localidad morenense de Paso del Rey. Aunque faltan pericias detalladas, un primer conteo arrojó que ocho de los vehículos que habían sido desmontados tenían pedido de captura por robo, la mayoría de ellos en La Matanza. Había también más de un centenar de autopartes de distintos automotores y chasis completos, pero aún de procedencia indeterminada. Calculan que son al menos 22 las unidades que se encontraban dentro de este taller clandestino.

Mientras que tres de los apresados ya recuperaron la libertad, el sujeto que está sindicado como el responsable del desarmadero quedó imputado por el delito de “Encubrimiento agravado, hurto agravado por la habitualidad y el ánimo de lucro”. Continúa detenido, a disposición de la justicia.
La investigación busca determinar quiénes son los restantes integrantes de la banda. El desarmadero es sólo un eslabón en esta cadena delictiva. Aún faltan quienes roban los vehículos y los lugares donde se reducen las autopartes. El expediente judicial sigue abierto.