Durante la madrugada del pasado domingo dos oficiales de la Policía de la Ciudad, uniformados pero francos de servicio, fueron abordados por delincuentes que se movilizaban en dos vehículos. Se produjo un tiroteo. Un adolescente fue alcanzado por las balas. Fue abandonado en el hospital por sus cómplices. Murió el lunes por la tarde. No está claro quién ejecutó el disparo que terminó con su vida.
El video de una cámara de seguridad de la municipalidad de Moreno fue clave para desentrañar una parte de la historia que tiene como desenlace la muerte de un adolescente. A las 5.44 de la mañana del domingo 30 de abril dos Policías de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires estaban a bordo de un Peugeot 208 color blanco. Estacionados sobre la calle Graham Bell casi colectora norte de la Autopista del Oeste, esperaban la llegada de un colectivo. En esos momentos aparece una Amarok que choca al Peugeot y lo encierra. En apoyo había un Bora. Un delincuente baja de la camioneta e intenta abrir la puerta del acompañante del Peugeot. Y se desató la locura.
El oficial de la Policía de la Ciudad, que estaba sentado en el habitáculo del conductor, desciende armado y se produce un tiroteo. Forcejea con uno de los malvivientes que llegó en el Bora, mientras que el joven que había bajado primero se tira en la caja de la Amarok. Inmediatamente se dan a la fuga. El uniformado queda lesionado en la mano derecha. Es trasladado en una ambulancia del SAME hasta el hospital provincial Mariano y Luciano de La Vega.
Minutos antes del arribo del Policía, había ingresado un adolescente con una herida de bala en el abdomen. Las fuentes consultadas indicaron que tenía orificio de entrada y salida y que fue identificado como Tomás Elián Cuestas de 17 años y con domicilio en Moreno. Estaba solo y habría declarado que habían intentado asaltarlo. Habría sido en realidad abandonado por sus cómplices en la puerta del centro sanitario y entró por sus propios medios. Fue derivado de urgencia al quirófano y luego internado en el área de terapia intensiva. No resistió el post operario y murió durante la tarde de este lunes 1º de mayo. Enterados de la noticia sus familiares generaron incidentes en la guardia del hospital y tuvieron que ser contenidos por la Policía bonaerense.
Voceros vinculados a la investigación indicaron que analizadas las imágenes generadas por las cámaras de vigilancia municipales y el trabajo de los peritos en el lugar no queda claro si Cuestas fue alcanzado por una bala del uniformado o fue víctima del fuego cruzado generado por sus propios compañeros. Estaría comprobado que desde la Amarok efectuaron varios disparos.
La investigación está a cargo del Dr. Sebastián Dileo, auxiliar letrado de la UFI Nº 6 del fuero Penal Juvenil, donde se encuentra subrogado el Dr. Raúl Villalba. La causa está caratulada como “Homicidio y robo en grado de tentativa”. Hasta el momento no hay detenidos, pero la pesquisa avanza. Está acreditado que tanto la Amarok como el Bora habían sido sustraídos horas antes en distintos puntos de la región. Los delincuentes estaban abocados a un demencial raid delictivo que terminó a sangre y fuego.