La Policía Federal Argentina (PFA) desbarató en la provincia de Buenos Aires, una banda narco integrada por ciudadanos colombianos y argentinos acusados de contrabandear desde Estados Unidos, gran cantidad de Metilendioxipirovalerona (Mdpv) denominada comúnmente como la “droga caníbal”. A través de una entrega vigilada con colaboración de Homeland Security se detuvo a tres personas y se incautaron pastillas de esa droga, armas y numerosos DNI, entre otros elementos.
La permanente colaboración entre el Ministerio de Seguridad de la Nación y el Departamento de Seguridad Nacional de los Estados Unidos para combatir el crimen organizado permitió desarticular esta banda. En abril, se descubrió en la ciudad de Memphis, Estados Unidos, un paquete que contenía un souvenir con temática de calendario maya, con droga en su interior. El hallazgo se produjo en un centro de distribución de una importante multinacional de envíos por correo.
La oficina de Homeland Security trasladó el envío postal hasta la llegada a nuestro país, donde el contenido fue sustituido por el personal de División de Operaciones Federales junto a la AFIP-DGA. Se le colocó un dispositivo GPS y de videofilmación camuflado, para que continúe su curso correspondiente por medio de una entrega vigilada.
La entrega se materializó en el mes de mayo, siendo rechazada por su destinatario, por lo que los federales profundizaron la investigación, estableciendo que el responsable de la encomienda era un colombiano. A su vez, se detectaron dos domicilios ubicados en José C. Paz y otro en Ingeniero Budge, vinculados a los fines de la organización narco.
Con el total de las pruebas aportadas el Juzgado Nacional en lo Penal Económico N° 2 a cargo de Pablo Yadarola, Secretaría N°4 del Gonzalo Acuña se ordenaron allanamientos de las fincas donde se detuvo a dos ciudadanos colombianos, uno de ellos quien estaría ligado al despacho del paquete en cuestión y un argentino. Además se secuestraron 400 pastillas de Metilendioxipirovalerona (MDPV), 1 revólver calibre 22 corto, 2 automóviles, 326.000 pesos, 3 notebooks, 16 documentos de identidad, 52 teléfonos celulares y demás documentación de interés para la causa.
Los detenidos, junto a los elementos secuestrados, quedaron a disposición del magistrado interventor por infracción a la Ley 22.415 de contrabando de estupefacientes.
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