Fuentes del hospital Mariano y Luciano de la Vega confirmaron que fue un solo disparo. Pasó por la mano en posición defensiva, ingresó por la clavícula y se alojó en el tórax. Fue herido con un arma Bersa 380, la cual habría sido secuestrada por la Policía.
La víctima, de 7 años, fue intervenida en el centro sanitario. La cirugía duró una hora y media, y los médicos lograron estabilizarlo. Luego fue derivado a la Unidad de Terapia Intensiva Infantil del hospital nacional “Posadas”, donde quedó internado con pronóstico reservado.
Voceros que entienden en la investigación señalaron que el chico de 13 años (no 11, como trascendió inicialmente) estaba a cargo de sus dos hermanos, mientras que la madre salió a hacer un trámite. La familia estaba cuidando la casa de una persona conocida que está de vacaciones. En esas circunstancias, encontraron el arma que se disparó accidentalmente cuando era manipulada por el nene mayor, quien entró en una crisis nerviosa mientras que al más pequeño lo trasladaban para su atención. Tiene apoyo psicológico por parte del Servicio Local de Niñez.
La causa la maneja la UFI Nº 6 de Responsabilidad Penal Juvenil del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez, pero será desestimada. Se trata de un menor inimputable, más allá que se haya tratado de un evento absolutamente fortuito. Las actuaciones las llevó adelante personal de la Comisaría 1º de Moreno.