Dos jóvenes fueron asesinados en un descampado de la localidad morenense de Cuartel V. La principal hipótesis de investigación es la de un ajuste de cuentas vinculado al narcotráfico. Hasta el momento no hay detenidos.
Durante la noche de este viernes 5 de febrero, Héctor Brítez Guerrero (18 años) pasó a buscar a Cristian Pereyra Pavón (19) por su casa del barrio El Progreso de Cuartel V y caminaron menos de un centenar de metros, para ingresar en un campo ubicado en el cruce de las calles Ricchieri y Nazca. Minutos después, los vecinos escucharon varias detonaciones de arma de fuego. No se supo nada más de ellos, y en rigor de la verdad, nadie se preocupó.
En la mañana del sábado, un hombre que cabalgaba encontró los cadáveres. Llamaron al servicio de emergencias 911 y arribaron varios móviles policiales, entre ellos, un patrullero de la Comisaría Moreno 4º (Cuartel V).
Los peritos de la Policía Científica lograron secuestrar entre los pastizales algunos casquillos de una pistola 9 mm. El médico forense determinó que cada una de las infortunadas víctimas presentaba cinco impactos de bala, uno de ellos en la cabeza. Fueron ejecutados.
La principal hipótesis con la que trabaja la justicia es la de un ajuste de cuentas. Algunos testimonios habrían indicado que sólo vieron entrar en el predio a Brítez Guerrero y a Pereyra Pavón. Se presume que los sicarios -se sospecha que serían dos- los estaban esperando e inmediatamente los asesinaron.
El Dr. Leandro Ventricelli –a cargo de la UFI Nº 1 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez- tendría como dato que ambos jóvenes estaban vinculados a la venta de drogas al menudeo en la zona. La pesquisa avanza para determinar las conexiones que permitan identificar a los homicidas.