Eduardo Lucero, vecino de 50 años del barrio Santa Paula, estaba compartiendo unas pizzas y bebidas con sus amigos en la puerta de su casa cuando fue asesinado a puñaladas por un hombre con el que días atrás había mantenido un entredicho. En el ataque también resultó herido uno de los hijos de la víctima, quien salió en defensa de su padre. El hecho se produjo cerca de las 5 de la mañana de este sábado 7 de noviembre sobre el pasaje Plutarco –corre paralela entre las calles Soldado Toledo y Ecuador a lo largo de dos cuadras- entre Barker y Rauch.
Según informaron fuentes policiales, el acusado ya fue detenido por la policía. Fue identificado como Walter Gerez, de 31 años, alias “Caquita”, quien tras un intercambio de palabras sacó un cuchillo y comenzó a apuñalar a Lucero. En esa circunstancia, Cristian, el hijo del hombre asesinado, de 29 años, intercedió, trató de defender a su padre, pero también terminó lastimado.
Ambos debieron ser trasladados al centro médico más cercano, la Maternidad “Estela de Carlotto” en la localidad morenense de Trujui. Lucero, que tenía tres cortes en el tórax, ingresó al nosocomio sin vida. En tanto, Cristian recibió las primeras asistencias en el lugar y más tarde fue derivado al Hospital provincial Mariano y Luciano de la Vega. En su caso presentó lesiones de arma blanca en la zona del abdomen y actualmente se encuentra fuera de peligro.
Mientras las víctimas fueron auxiliadas, Gerez aprovechó para escapar. No obstante, fue arrestado a las pocas horas. Esta mañana, efectivos de la Comisaría Segunda lo detuvieron en un domicilio ubicado inmediaciones de donde ocurrió el crimen. De acuerdo a las fuentes, el acusado intentó escapar y al verse rodeado, tomó un cuchillo y amenazó con defenderse. Finalmente, fue reducido sin que la situación escalara a mayores.
Mauro, hijo de la víctima, reveló que el conflicto se originó cuando Gerez acosó verbalmente a una de las hijas de Lucero. “Su acoso no era un silbido o algo así, le dijo cosas asquerosas. Entonces mi papá un día lo cruzó y le dijo que no se zarpe. Pasó un tiempo y ayer mi papá lo saludó pensando que era otra persona y él (Gerez) se ve que ya lo tenía en la mira”, dijo Guadalupe, otra de las hijas de Lucero.
“Mi viejo confrontó la situación pero solo con diálogo. Pero ayer parece que el tipo estaba cargado y quería la revancha. Vino directamente a lastimarlo”, agregó Mauro. Lucero tenía una especie de almacén en el barrio llamado “Nenurri”. Tenía 4 hijos.
El imputado tiene antecedentes penales. De hecho, había estado preso hasta hace menos de dos meses tras cumplir una condena a 13 años de cárcel por un homicidio sucedido el 1º de octubre de 2007 en Trujui. Agredió a un hombre, aplicándole un palazo en la cabeza para robarle una botella de vino. La víctima murió un par de días después en el hospital local. Fue condenado a prisión por delito de “homicidio criminis causa”. El asesinato lo concretó a semanas de haber cumplido 18 años. Además, ya tenía antecedentes por robo, siendo menor. Gerez fue liberado el 25 de agosto pasado, con el beneficio de la libertad asistida. Ahora está nuevamente tras las rejas en el marco de una causa que lleva adelante la Dra. Luisa Pontecorvo, de la Unidad Funcional de Instrucción N° 3 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez. Justamente la fiscalía que intervino en el 2007 estaba comandada por la misma magistrada, pero en aquel momento era la UFI Nº 10 del Departamento Judicial de Mercedes.
Este sábado, familiares y vecinos se congregaron en la escena del crimen para pedir justicia. Con el correr de las horas, los manifestantes incendiaron la casa de Gerez.