“Estamos indignados y sorprendidos. No entendemos por qué fallaron así, en el juicio quedó comprobado que él fue el abusador. Vamos a apelar porque quiero mirar a los ojos a Rami y decirle: hice todo”, dijo Diego Hernández, padre de la víctima, luego de escuchar la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) número 3 de San Isidro en el juicio al kinesiólogo Pablo Rubén Torres. El debate oral concluyó el viernes y pese a que la fiscalía había pedido 16 años de cárcel y el abogado de la familia 19, los jueces Marcelo García Helguera, Verónica Di Tomasso y Raúl Luchelli Ramos le dieron 7 años y medio de prisión y 5 de inhabilitación para ejercer, por encontrarlo culpable de “abuso sexual agravado con acceso carnal”.
Tanto la querella como la fiscalía habían considerado como agravante que el niño, de tres años y con síndrome de Down, estaba bajo la guarda de Torres al momento del abuso, realizando un tratamiento de rehabilitación en la Clínica Soles de San Fernando. Pero los magistrados descartaron el agravante. “El hombre estuvo con el chico a solas durante 30 minutos y la madre estaba en el hall”, explicó a la agencia Infojus Noticias el fiscal José Ignacio Amallo. El funcionario adelantó que analizará los argumentos durante la feria judicial y evaluará si apela o no. “Estoy conforme porque pudimos probar el abuso. La prueba directa era poca pero había mucha prueba indiciaria”, dijohttps://www.youtube.com/watch?v=6hX3O0NK40c