Luego de la renuncia del Obispo Fernando María Bargalló a la titularidad de la diócesis de Merlo y Moreno, se realizó, como estaba planificada desde hace varios meses, la ceremonia religiosa para conmemorar el 15º aniversario de la creación de la sede pastoral. Presidió la misa el Cardenal Jorge Bergoglio, quien estuvo acompañado por Monseñor Jorge Casaretto, nombrado como administrador diocesano, cargo transitorio cuya vigencia finalizará en el momento que el Papá Benedicto XVI designe a un nuevo Obispo.
“Hay una tristeza que hace que hoy la Iglesia no pueda festejar como quisiera estos 15 años donde se hicieron tantas cosas bajo la guía del pastor”, sostuvo anoche el arzobispo porteño, cardenal Jorge Bergoglio, en la misa realizada para conmemorar un nuevo aniversario de la diócesis de Merlo y Moreno.
En la desbordada Catedral “Nuestra Señora del Rosario” en Moreno, Bergoglio oró para que la Iglesia pueda “transformar la tristeza en esperanza”. Así se refirió, sin nombrarlo, al obispo Fernando Bargalló, que renunció a la sede episcopal tras el escándalo por la difusión de fotos comprometedoras con María de las Victorias Martínez Bo en una playa en México en el verano de 2011.
Fue su provisional sucesor en la diócesis, monseñor Jorge Casaretto, quien precisó la situación actual de Bargalló. “Ahora le toca a Fernando estar en un tiempo de retiro, de penitencia y de oración. Mi misión es acompañar al hermano Fernando en su camino de reflexión. Esta es una etapa de transición y espero que sea por poco tiempo”, dijo quien asumió como administrador diocesano. Casaretto desempeñará este cargo, en una “transición hasta que el Papa designe al nuevo Obispo”, explicó.
Tanto Bergoglio como Casaretto tuvieron palabras de respaldo hacia la misión pastoral de Bargalló. Fue Bergoglio el que, elípticamente, aludió al poder político en la situación actual del ex obispo. “Trabajó para los pobres y esto le valió la persecución. Trabajó también por los ancianos y para escuchar a los chicos. Hoy tenemos a la Iglesia unida, humanitaria y misionera y venimos a dar gracias por estos 15 años caminando juntos”. Los rumores, obviamente nunca confirmados, apuntan contra el intendente de Merlo, Raúl Othacehe como el ideólogo de la “operación” que culminó con un escándalo y la renuncia de Bargalló a la diócesis de Merlo y Moreno.
En la misa por los 15 años de la diócesis de Merlo-Moreno, creada por decreto del papa Juan Pablo II el 28 de junio de 1997 y que tuvo como primer obispo a Bargalló, estuvieron todos los sacerdotes de esta jurisdicción, muchos vecinos de Merlo y de Moreno y hasta un grupo de la comunidad religiosa Servidores del Evangelio, que inició en 2002 su actividad pastoral allí y se fue ampliando a otras diócesis.
“La iglesia, siempre que pasa por una problemática compleja y difícil como la que estamos protagonizando, quiere dar un testimonio de la misericordia del Señor, buscándola a través de esta acción orante y penitencial” agregó Casaretto, el único orador de una conferencia de prensa realizada luego de la ceremonia religiosa. “Fue una sorpresa tener que vivir esta misión cuando ya había llegado el tiempo de ser Obispo emérito de San Isidro, pero uno siempre debe estar disponible para lo que la iglesia pida” reveló Casaretto, de 75 años de edad. Finalmente, ante la consulta sobre la posibilidad de que Bargalló emita algún tipo de comunicado hablando del escándalo desatado, Casaretto refirió “que Bargalló habla a través de su silencio”.