En la madrugada del domingo 20 de julio un vecino de La Reja Grande filmó un puma que descansaba dentro del predio del SUTERH. Ante el avistamiento, se generó una alarma. Una mujer, habitante de la zona, denunció que el animal masacró a una decena de cerdos. La municipalidad de Moreno armó un operativo para su captura. Ante la falta de novedades, lo levantó. ¿Qué pasó con el puma?
A casi un mes del avistamiento de un puma en la zona de La Reja Grande, ya nadie lo busca. El Cuerpo de Guardaparques de la municipalidad de Moreno, con sede en el parque Los Robles, levantó el operativo. Una fuente consultada indicó que “esperan nuevas denuncias”.
La alarma la dio un vecino, que filmó al animal descansando dentro del predio que posee el SUTERH (Sindicato Único de Trabajadores de Edificios de Renta y Horizontal), ubicado sobre la calle General Savio casi esquina Victorino de La Plaza. Fue en la madrugada del domingo 20 de julio. El video rápidamente se viralizó.
Ante la novedad, otra habitante de la zona, de nombre Nancy, denunció que “el puma atacó a los patos y a los cerdos que crío en casa, desde hace un año y medio”. Reveló también que “Perdí cerca de 12 chanchas grandes con sus crías y 10 patos. Pensábamos que los robaban los vecinos o se lo comían los perros”. Y expresó temor de que arremeta contra vecinos y pequeñas mascotas.

El comentario de esta mujer dio base a una de las principales hipótesis que manejan los especialistas. Sospechan que el puma está en cautiverio de manera clandestina y escapa periódicamente. Apuntan a algunas de las viviendas que se encuentran dentro del country San Diego. ¿Volvió a su “hábitat” no natural o sigue suelto en las cercanías? No hay datos que permitan tener una certeza.
Consideran que el animal es un concolor cabrerae, una subespecie de puma que ocupa la zona que va desde Bolivia, el oeste de Paraguay, y el noroeste y centro de la Argentina. Posee alta capacidad de adaptación a distintas regiones. Se alimentan principalmente de mamíferos, aunque también consume reptiles y pájaros, y en ocasiones llega a atacar al ganado doméstico. Prefieren habitar en lugares silvestres; excepcionalmente se acercan a núcleos urbanos.
Esa misma semana el Cuerpo de Guardaparques, encabezado por el jefe José Barreiro, había armado un operativo en un campo de unas 50 hectáreas, lindante con los countrys San Diego y Prados del Oeste. Los rastros indicaron que el felino se había refugiado entre la profusa vegetación. Contaron con ayuda de distintas dependencias de la provincia de Buenos Aires. Trabajaron drones de última generación. El resultado fue infructuoso.
Pocos días después, ante la falta de novedades, desistieron de continuar las tareas. Pero los vecinos están preocupados. Temen una nueva aparición. Y se preguntan: ¿Dónde está el puma?
La secretaría de Medio Ambiente de la comuna publicó un comunicado que consigna: “Recomendamos a los vecinos que, ante la presencia del animal, procedan a espantarlo haciendo ruido con las palmas, gritando o con luz de una linterna y posteriormente comunicarse al siguiente número para notificar el avistamiento: +54 9 237 403-5808”
