El próximo jueves el Concejo Deliberante de Moreno tratará el pliego de licitación para contratar, a través de un tercero, la mano de obra para la recolección de residuos. La prórroga del contrato con la empresa “El Trébol” expira el 9 de noviembre y el municipio apunta a un nuevo paradigma en el servicio.
Dentro de este proyecto, a tratarse en la reunión legislativa, la recolección de residuos sólidos urbanos tiene asignada un presupuesto de 3.734.687.924 pesos por los siguientes 6 años. Prorrateado de manera mensual, son unos 51.870.000 de pesos. La factura que presentó “El Trébol” en enero de este año asciende a la suma de 60.178.000 pesos –que habría sido abonada en marzo-.
No hubo, al menos no detectamos, que la empresa se haya beneficiado en estos meses con una readecuación de precios que elevara esta suma. El presupuesto de la comuna para este 2020 –aprobado en diciembre pasado- asignó para el proceso integral de recolección de residuos sólidos urbanos 720 millones de pesos anuales. Las diferencias son sensibles, y no solamente en la cantidad de dinero destinado.
El pliego de licitación, que se debatirá primero en comisiones, señala que el servicio se prestará en 11.002 cuadras del distrito. El Trébol, en base a ese documento de cobro, marca 12.008 cuadras. La recolección se presta en 26 días del mes. El valor de la cuadra para el municipio, en el nuevo proyecto, es de 181,33 pesos. Respecto a El Trébol, el costo es de 192,78 pesos por cuadra.
Los cuestionamientos rondan en torno a algunas cuestiones operativas: mientras que “El Trébol” costea los asuntos cotidianos de trabajo, principalmente los camiones y gastos como gas oil, la propiedad de los camiones en el proyecto a debatir esta semana, corresponde al municipio, como así también la inversión de combustible. Es decir, el capital de trabajo es de la comuna.
Este viernes el municipio publicó un flyer donde se consigna un ahorro del 46% en el gasto del servicio y la incorporación de mil cuadras más en los recorridos. No se sostiene esta postura en base a lo plasmado en el proyecto.
¿Es lógico que sólo haya poco más de 11 pesos de diferencia en el valor de la cuadra, cuando en el nuevo proyecto sólo se contrata la mano de obra? Un tema que ya está causando fuertes controversias. Los números son claros, más allá de la discusión de un cambio de paradigma en la Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos. No se discute la calidad del servicio que presta El Trébol, a todas luces deficiente, sino en la economía de la prestación respecto al ahorro de la comuna.