Juan Pablo Anghileri recibió, el pasado jueves 15 de marzo en horas de la tarde, al jefe comunal de Tigre, Sergio Massa. La reunión, de alto contenido político, se enmarcó en la firma de un convenio marco de colaboración e intercambios de experiencias entre ambos municipios.
Ya desde hace varios años, casi desde el mismo momento que dejó la jefatura de gabinete nacional para asumir la intendencia de Tigre, Sergio Massa busca con ansias el camino cuyo destino lo deje a cargo de la gobernación bonaerense. En las últimas primarias Massa amagó con presentarse en las elecciones, pero finalmente, luego de un supuesto acuerdo alcanzado con el mandatario provincial, desistió de competir. Ahora, con Scioli imposibilitado de aspirar a un nuevo período por las limitaciones de la carta magna bonaerense, Massa picó en punta para reemplazar al gobernador en los comicios del 2015.
La relación entre Massa y Anghileri nace en los turbulentos tiempos políticos que se vivieron poco más de dos años atrás en General Rodríguez y que finalizaron con la destitución de Marcelo Coronel como intendente. Algunos dirigentes analizan expectantes este encuentro, que se configura clave dentro de los movimientos políticos del partido oficialista. Mientras algunos analistas vernáculos opinan que este acercamiento responde a la estrategia provincial de Massa, otros ven en la maniobra una canal de diálogo entre los jefes comunales que mantienen buenas relaciones con Scioli -que aspira a reemplazar a Cristina Fernández de Kirchner- y los intendentes que vislumbran en Massa un hombre joven, con grandes posibilidades de convertirse en una figura de gran peso en la política bonaerense. En este esquema, Anghileri – de excelente relación con Scioli y con buena llegada a referentes de la talla de Hugo Curto, Raúl Otacehe y Mariano West, quienes rechazarían a Massa- sería un interlocutor válido con los distintos sectores. No está de más remarcar que el intendente de Tigre cuenta con una alta imagen positiva en las encuestas de opinión que realizan periódicamente distintas consultoras y maneja su gestión comunal con una exposición mediática más que interesante.
Luego de una reunión de poco menos de una hora en el despacho de Anghileri -de la que también participó Joaquín de la Torre de San Miguel-, el intendente de General Rodríguez y Sergio Massa se dirigieron a la sala de sesiones del Honorable Concejo Deliberante. Allí lo esperaban el presidente del Cuerpo Gonzalo Graña junto a otros ediles. También aguardaban pacientemente miembros del departamento ejecutivo y militantes.
Al finalizar los discursos protocolares -intercambio de regalos incluidos- ambos intendentes atendieron a la prensa. Massa explicó la razón de la firma del convenio marco, ya que el mismo permitirá “buscar un mecanismo de articulación que permita que los municipios crezcan, y crezcan todos por igual. El secreto tiene que ser igualar para arriba”.
En el mismo sentido, Anghileri indicó que “la sinergia entre municipios se da trabajando articuladamente entre todos. El trabajo mancomunado entre todos los intendente de la primera sección electoral hay que destacarlo, donde las experiencias exitosas se vuelquen para mejorar la calidad de vida de los vecinos”.
Massa destacó la “mirada común, solidaria, de trabajo compartido, no creer que hay un municipio más grande o importante que otro. Todas son ciudades de la provincia donde viven ciudadanos que esperan respuestas” pero sin dejar de observar que “cada ciudad tiene su propia identidad. Hay cosas escalables que se pueden replicar pero tiene que contemplar la idiosincrasia de cada lugar, las costumbres, la forma de vida, la cultura y la historia”.
El tigrense también aseguró que “tenemos que aprovechar al máximo este año, que es exclusivamente de gestión, para como se dice por estos días hacer sintonía fina, avanzar en cosas que después resultan en cambios concretos en la vida de la gente: avanzar en política industrial significa empleo, avanzar en seguridad lleva a que la gente viva más tranquila, avanzar en política urbanística, significa que la gente viva en una ciudad que a la gente le guste más. Eso son los desafíos que tenemos por delante los intendentes”. Ante la consulta de un colega de la existencia en General Rodríguez de un dirigente que se arroba su apoyo en las internas del partido justicialista (Gustavo “Baby” Gómez), Massa disparó “hay que dedicarse a gobernar. El que piensa en elecciones durante este año tiene mierda en la cabeza”.
Massa también reflexionó que “algunos podrían decirme que mi municipio está adelantado. Yo le respondería que claro, porque mi municipio tuvo la suerte, mientras que General Rodríguez lo tenía a Marcelo Coronel, nosotros lo teníamos a Ubieto. Ubieto se dedicaba a gestionar y Coronel no”.
Como ejemplo de cambios a partir del reflejo en otra comuna, Anghileri indicó que “la ordenanza fiscal impositiva en General Rodríguez no contempla cuestiones técnicas que vamos a trabajar con Tigre para mejorarla, porque hay algunas cosas injustas que tenemos que subsanar, redireccionando la capacidad contributiva y la elaboración fiscal”.
Finalmente, los intendentes volvieron a charlar reservadamente en la calle durante unos 20 minutos, antes que Massa abandonara definitivamente el distrito.