Sigue grave el joven arrojado al fuego en Merlo e intentan establecer quiénes lo atacaron

El joven de 20 años que fue arrojado al fuego por un grupo de vecinos que lo acusaba de haber participado del crimen de un colectivero cometido el martes pasado en el partido bonaerense de Merlo sigue internado en grave estado, mientras que la Justicia intenta establecer quiénes participaron del ataque, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.

Se trata de un joven que es cuñado de Jonathan Acosta (27), quien está preso por el crimen del colectivero Federico Rivero (43), hecho al que los vecinos también lo vinculan y por el cual incendiaron su casa situada en Marcos Sastre al 1300, de Merlo, y lo arrojaron al fuego, explicaron los voceros.

Tras el ataque, la víctima fue trasladada al Hospital Eva Perón de esa localidad, donde hasta este mediodía permanecía en terapia intensiva, intubada y con serias quemaduras en el cuerpo.

Además, la fiscal Paula Salevsky, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 de Morón, ordenó la toma de testimonios de los familiares del joven que se encontraban con él al momento del hecho, y los investigadores creen que cuatro de los manifestantes que se reunieron frente a la vivienda son quienes lo atacaron.

En tanto, un hermano del herido, Guillermo, comentó en diálogo con el canal de noticias TN que solicitaron su traslado al Instituto del Quemado, y negó que el joven haya estado involucrado en el crimen del colectivo, aunque admitió que «andaba robando».

«No viene al caso tratarlo de esta manera, tienen razón, pero no con esa justicia, no haciéndole lo que le hicieron», expresó al referirse a que si bien su hermano roba, no estuvo relacionado con el homicidio del chofer.

Por otro lado, una vecina de la zona pidió «protección para el barrio» porque están «amenazados» por el joven y su familia, con quienes «tienen problemas todos los días, desde siempre».

El incendio se produjo cuando el muchacho se encontraba junto a su hermana y otras personas de su entorno familiar y varias personas se reunieron frente a la vivienda y comenzaron a gritarles «¡Asesinos! ¡Chorros!».

Los manifestantes arrojaron piedras, palos y botellas contra la casa, mientras que uno de los agresores ingresó armado con un cuchillo al lugar, aunque no logró herir a ninguno de los presentes.

De acuerdo a las fuentes, en ese momento otras personas irrumpieron en el lugar y prendieron fuego el humilde inmueble, tras lo cual tomaron al joven por la fuerza y lo arrojaron a las llamas.

Los pesquisas constataron que el domicilio había sido allanado en 2018 en una causa por drogas, y en esa oportunidad detuvieron al padre y a un hermano del ahora herido.

Por otra parte, por el crimen del colectivero Rivero permanece detenido Acosta, quien al momento de ser capturado por la Policía, manifestó tener síntomas compatibles con el coronavirus, por lo que se le efectuó un primer testeo que arrojó resultado negativo, lo que indica que en principio no estaría infectado.

Acosta y un segundo detenido por ese hecho, que ya contaban con antecedentes penales, fueron apresados entre el jueves y el viernes pasado en el barrio La Blanquita y El Pericón, ambos en la localidad de Libertad, en Merlo.

El crimen de Rivero ocurrió el martes de la semana pasada, cerca de las 19.30, cuando el chofer se encontraba dentro de su auto y fue sorprendido por dos delincuentes que intentaron robarle el vehículo y otras pertenencias, y que lo balearon cuando él se resistió.