Dos oficiales del Grupo de Apoyo Departamental fueron heridos por disparos de arma de fuego cuando encabezaban un allanamiento en el barrio La Perla. Buscaban al imputado de un abuso sexual, entre otros graves delitos. Luego de un intenso tiroteo, fue finalmente detenido. Había recibido un balazo en una pierna. Tenía antecedentes y un pedido de captura pendiente. Además, vecinos lo acusan de vender drogas en ese lugar.
Durante la mañana de este viernes 21 de marzo, la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de Moreno y General Rodríguez llevó adelante un allanamiento ordenado por el Juzgado de Garantías Nº 1. Lo había solicitado la Dra. Betiana Guillerón, fiscal de la UFI Nº 2 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez.
El operativo fue consecuencia de un expediente que instruye la Dra. Guillerón por una aberrante denuncia de abuso sexual. Las fuentes consultadas indicaron que la pesquisa comenzó a finales del pasado mes de febrero y que el suceso ocurrió en el plan federal del barrio La Perla de Moreno Norte, conocido coloquialmente como “Las Casitas”.
Los confidentes señalaron que una chica de 18 años había visitado a una amiga y estaban compartiendo unos mates. En un momento la dueña de la vivienda se ausentó y apareció en escena un sujeto. Este individuo habría convencido a la joven para que lo acompañe hasta otra casa.
Una vez que entraron en la construcción la habría drogado. Debido al estado de indefensión, abusó sexualmente de ella. Y la dejó encerrada en una habitación por varias horas. Posteriormente volvió a violarla. Luego la liberó. La víctima, shockeada, realizó la denuncia, dando inicio a la investigación.
En la redada, la DDI contó con la colaboración del Grupo de Apoyo Departamental (GAD) de Mercedes. Cuando ingresaron los uniformados de esta última repartición fueron recibidos a los tiros limpios. Dos oficiales resultaron heridos; uno en el antebrazo derecho y el otro en ambos brazos. Fueron asistidos por sus compañeros, que los subieron a las cajas de dos móviles y los llevaron al hospital provincial Mariano y Luciano de la Vega. Finalmente el sujeto fue reducido, no sin antes intercambiar disparos con la fuerza de seguridad.
El detenido fue identificado como Carlos Alberto Coronel (alias Cristian, alias Coco), de 42 años. Recibió un balazo en la pierna izquierda. Tenía dos pedidos de captura pendiente por los delitos de “abuso sexual, amenazas agravadas, privación ilegítima de la libertad y lesiones”. Ambas causas instruidas en la UFI Nº 4. Ahora se le suma “abuso sexual agravado por acceso carnal, privación ilegítima de la libertad agravada, resistencia y atentado a la autoridad, abuso de armas, lesiones y tenencia ilegal de arma de guerra” que se tramita en la UFI Nº 2.
Los vecinos vieron con alivio como sacaron a Coronel esposado de la casa ubicada en la Manzana 10. Porque además revelaron que este individuo, quien aterrorizaba a la comunidad con actitudes muy violentas, vendía drogas en el lugar. Los oficiales no encontraron estupefacientes, pero si secuestraron una pistola 9 mm robada a un miembro de la Policía de Seguridad Aeroportuaria, más de un centenar de municiones, un rifle de aire comprimido y cuatro teléfonos celulares.
Tanto Coronel como los policías fueron atendidos en el centro sanitario dependiente del gobierno bonaerense. Luego de las curaciones, fueron dados de alta. Coronel fue derivado a la sede de la DDI en General Rodríguez, quedando alojado en los calabozos.
El lunes será trasladado a la sede de la fiscalía Nº 2 para que preste declaración. Se descuenta que también tendrá que ser indagado por la 4. Va a estar muy requerido. Con las acusaciones que pesan sobre él, la temporada que pasará a la sombra será muy prolongada. Ya cumplió condenas por distintos delitos, totalizando 16 años desde su mayoría de edad. Irrecuperable, evidentemente.