Allanamientos por drogas, la creación de una ayudantía fiscal especializada y la falta de recursos en la justicia

Aunque la Procuración de la provincia insiste en profundizar en las investigaciones de la venta de drogas al menudeo (que tiene competencia en la justicia ordinaria) la realidad indica que la Fiscalía General del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez no tiene recursos suficientes para afrontar la problemática. Ante el análisis de los sucesos más graves (como homicidios dolosos y robos agravados), quedó en evidencia la vinculación de estos hechos con la comercialización y el consumo de estupefacientes. Pese a las dificultades, el Fiscal General Lucas Oyhanarte creó la Ayudantía Fiscal especializada en la temática para reforzar el trabajo de la Fiscalía enfocada en estos delitos.

El informe de gestión 2019 de la Procuración bonaerense (de la cual dependen las fiscalías y las defensorías generales de los 20 departamentos judiciales desperdigados en el territorio de la provincia) indica que en Moreno y General Rodríguez se instruyeron 4.491 causas por el tráfico de drogas donde se vieron vinculados mayores (más 120 adicionales donde había menores imputados). Los datos oficiales del 2022 señalan que fueron 2504 (71 menores). Una sensible baja del 45%. ¿Hay menos drogas en las calles? La respuesta es sencilla: No. La razón evidente es que la justicia no tiene recursos para afrontar las investigaciones. Pese a la recomendación de profundizar el trabajo en ese sentido que hicieron desde el organismo provincial, comandado por el Dr. Julio Conte Grand, la labor la tienen que realizar con los mismos elementos existentes. Mientras tanto, sigue pendiente la puesta en funcionamiento de diez fiscalías más creadas por ley hace más de seis años.

A finales de mayo la UFI Nº 12 (donde está subrogado el Dr. Leandro Ventricelli, fiscal titular de la UFI Nº 1) desarrolló una pesquisa que se inició con denuncias anónimas. Los allanamientos se desarrollaron en Catonas (Moreno) y en Altos del Oeste (General Rodríguez) donde hubo cinco detenidos, todos mayores de edad. Secuestraron 60 dosis y dos trozos compactos de cocaína y armas de fuego. Días después los operativos se realizaron en Casasco (Moreno) donde la Policía incautó 70 gramos de cocaína y casi 30 de marihuana. Los aprehendidos fueron tres, también mayores.

Estos resultados son consecuencias de la creación a mediados del pasado mes de mayo de la Ayudantía Fiscal especializada en drogas, que reforzó el trabajo de la UFI Nº 12, dividiendo los distritos. Mientras la primera se enfoca en General Rodríguez, la segunda tiene eje en Moreno.  La decisión la tomó el Dr. Lucas Oyhanarte, fiscal general, luego de un análisis estadístico que resultó impactante: La mayoría de los homicidios dolosos y muchos de los robos agravados ocurridos en la jurisdicción tienen una vinculación directa con la venta y consumo de drogas.

De esta manera se redistribuyeron los recursos humanos para atender un delito que crece a pasos agigantados en las barriadas, incidiendo sin dudas en la inseguridad que sufren los vecinos. Son cuatro los funcionarios asignados, que fueron relocalizados y un mismo fiscal para las dos dependencias: El Dr. Leandro Ventricelli. Hay un pedido de seis empleados judiciales más, requerimiento que no fue atendido hasta el momento por la Procuración. Se necesita una urgente resolución, una mirada presupuestaria empática.

El narcomenudeo tiene competencia en la justicia provincial mientras el tráfico a gran y mediana escala es investigada por la justicia federal. Por este motivo es fundamental la coordinación entre ambas esferas. Poco sirve atacar a los denominados “kioscos” si el caudal torrentoso de droga no se detiene.

Pero en el departamento judicial de Moreno y General Rodríguez se presenta un problema fundamental y fundacional: Cuando en el 2009 sancionaron la ley de creación del Juzgado, Defensoría y Fiscalía Federal, la normativa presentó un defecto de forma y la Corte Suprema no habilitó la formación de la secretaría criminal, como sí lo hicieron con la Contencioso Administrativa, Ejecuciones Fiscales, Correccional y la Civil y Comercial. Por lo tanto las grandes pesquisas vinculadas a la distribución y comercialización de estupefacientes que escapan de la órbita provincial, son atendidas en mayor medida por el Juzgado Federal de Morón y algunas por el de Mercedes.  En resumen: primero instruyen las correspondientes a esos departamentos judiciales y luego posan la mirada en Moreno y General Rodríguez. Así es muy difícil.

Pese a los reclamos por parte de los distintos actores de la vida cotidiana del departamento judicial de Moreno y General Rodríguez e incluso de los respectivos intendentes y funcionarios de alto rango, la situación se mantiene inalterable. Hay que modificar la ley y sumar al articulado la correcta creación de la secretaría criminal. Parece sencillo pero lo sencillo se vuelve desesperadamente burocrático en el congreso nacional. Mientras tanto sufren los vecinos de Moreno y General Rodríguez.

Un dato adicional: el juez designado en el fuero federal de Moreno está subrogado en Lomas de Zamora. Federico Villena, quien fue nombrado por Cristina Fernández de Kirchner durante su presidencia, tuvo su primer destino en este último distrito. Luego se confirmó su puesto en Moreno y General Rodríguez. Llegó al edificio de Piovano 3129 (frente a las vías del ferrocarril Sarmiento), vio luz, entró y salió nuevamente para el sur del conurbano, con el aval del macrismo. Más allá de varios ruidos mediáticos y judiciales (algunos muy fuertes) el magistrado está muy cómodo en el sillón que está ocupando y no tendría entre sus planes volver al oeste. Porque se sabe muy bien: En el oeste está el agite. Y también los dolores de cabeza.  ¿Quién será el valiente que finalmente se hará cargo?