Ocurrió en la noche del miércoles 10 de julio. El chofer de DiDi recibió siete puñaladas, Milagrosamente salvaron su vida en el hospital de Moreno. La investigación arrojó dos detenidos. La sorpresa: uno de ellos estaba preso en la cárcel de Florencio Varela.
La pesadilla para un conductor de DiDi comenzó al anochecer del miércoles 10 de julio. Recibió un pedido a través de la app para transportar a una pareja desde Villa Fiorito hasta Trujui. Un trayecto para unir Lomas de Zamora con Moreno. Un viaje para no despreciar. Confió cuando vio que la mujer cargaba una prominente panza. El embarazo estaba avanzado.
Ya en el barrio Lomas Verdes I de Trujui, en la esquina de las calles Evaristo Carriego y Aeronáutica Argentina, el conductor de 56 años sintió el frío acero de un cuchillo en su cuello y la orden incuestionable. Que se detuviera, porque lo iban a asaltar. El delincuente, joven, tomó inmediatamente como botín el teléfono celular y marcó un número. A los pocos segundos subió un cómplice.
Mientras los ladrones revisaban las pertenencias del trabajador, éste habría intentado descender del vehículo. Comenzaron a apuñalarlo. Finalmente lo lanzaron del habitáculo y con el auto, un Fiat Cronos, emprendieron el escape. El hombre quedó tendido en el asfalto, ensangrentado, frente a un conocido corralón de materiales de la zona. Los gritos de auxilio hicieron que salieran vecinos, quienes llamaron a la Policía y a una ambulancia.
Ingresado de urgencia en el hospital provincial Mariano y Luciano de la Vega, los médicos constataron que la víctima presentaba siete heridas de arma blanca: Cuatro en el brazo derecho, uno en el izquierdo y dos en el abdomen. Fue sometido a varias operaciones y lograron salvarle la vida. Estuvo más de un mes internado. A finales de agosto le dieron el alta.
El Fiat Cronos fue abandonado en Trujui y recuperado durante la tarde del jueves 11 de julio. Fue sometido a pericias. Con los resultados de estos análisis y el testimonio del chofer, parcialmente recuperado, la investigación se aceleró. La causa por “Homicidio agravado criminis causa en grado de tentativa en concurso real con robo agravado por el uso de arma blanca, en poblado y en banda” quedó bajo la órbita de la UFI Nº 8 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez que comanda el Dr. Gabriel López.
El trabajo mancomunado entre la fiscalía y la DDI a cargo del comisario Inspector Federico López comenzó a arrojar resultados. El pedido de informes a la empresa DiDi brindó el número de teléfono vinculado a la app. El aparato estaba a nombre de un hombre domiciliado en Villa Fiorito, también de apellido López. La geolocalización arrojó que estaba siendo usado en la Unidad Carcelaria Nº 54 de Florencio Varela. El hijo del titular de la línea estaba detenido allí, en la celda Nº 2 del pabellón 3.
Estamos relatando un sangriento suceso protagonizado por malvivientes de poca monta, crueles, pero ningunos genios criminales. Esto explica por qué el celular sustraído al conductor del auto de alquiler volvió a ser usado horas después del hecho. También fue ubicado, en este caso en una vivienda emplazada sobre la calle Cataluña entre Aeronáutica Argentina y Puccini, a 200 metros de la escena del crimen. La vigilancia realizada por los detectives de la “Brigada” fue positiva. Las características fisonómicas de uno de los sujetos que habitaba esa casa eran coincidentes con los datos aportados por la víctima del atraco. Ya había sido padre.
En las primeras horas del miércoles 30 de octubre se realizaron los allanamientos, con la autorización del Juzgado de Garantías Nº 1 y firmados por la Dra. Adriana Julián. Fueron cuatro en total. Dos de ellos en Lomas Verdes I, otro en el barrio Villanueva también en Trujui y en la mencionada penitenciaria.
En los operativos realizados en Lomas Verdes I secuestraron la documentación del Fiat Cronos (sí, la habían guardado; Un claro ejemplo de autoincriminación) y los policías detuvieron a Aaron Chaparro de 21 años. En Villanueva incautaron una escopeta tumbera, pero no lograron aprehender a un sospechoso. Y en Florencio Varela, en el calabozo donde está confinado Franco Samuel López de 18 años, hallaron el teléfono celular utilizado para dar inicio a este drama. Sobre López pesa una prisión preventiva acusado de participar de un robo similar al ocurrido en Trujui.
La pesquisa no está finiquitada. Aún hay un prófugo: el delincuente que subió esa noche del miércoles 10 de julio en la esquina de Carriego y Aeronáutica Argentina. Está identificado y tiene pedido de captura nacional.