Olga Verón tenía 37 años. Vivía en Murillo y El Maestro, en el asentamiento detrás del barrio José C. Paz de la localidad morenense de Cuartel V, junto a sus 4 hijos (de 14, 10, 8 y 5 años) y su pareja.
La noche del lunes 13 de abril, Olga, llegó sin vida al UPA de José C. Paz. La trasladaron hasta allí, dos vecinos, en su vehículo particular.
Lo que sucedió previamente, es materia de investigación.
Según la versión la hija mayor y el marido de Olga, la mujer de 37 años se encontraba en el baño lavando unas cosas, cuando de repente se desvaneció y al caer, se golpeó la cabeza. Su hija es quien escucha el golpe, se acerca y avisa a su padre, que intentó reanimarla mientras la niña fue en busca de un vecino.
El Fiscal Federico Soñora, al tratarse de una muerte dudosa, le dio intervención a la policía, para realizar un relevamiento vecinal, además de la operación de autopsia, cuyo resultado llegó el martes 14 de abril.
A partir de ahí, el escenario cambió por completo.
La autopsia reveló que la víctima sufrió un paro cardiorespiratorio traumático por asfixia manual, lo que sería considerado como una muerte violenta.
Por ese motivo, personal de la DDI, en conjunto con personal de Comisaría 4º de Moreno decidió allanar la vivienda donde sucedió todo, ubicada sobre la calle Murillo. En ese operativo, se aprehendió a la pareja de Olga Verón, Víctor C. de 38 años, de nacionalidad paraguaya, padre de sus 4 hijos. También se secuestró telefonía celular.
El principal sospechoso se encuentra alojado en los calabozos de la Brigada. Aún no se le tomó declaración.
Serán clave en la investigación, los testimonios de los hijos, al menos de las dos más grandes.
Intervienen la UFI Nº 4 y Juzgado de Garantías Nº 3 del Departamento Judicial de Moreno – General. Rodríguez.