Dos menores de edad fueron detenidos acusados de asesinar a sangre fría a un joven de 21 años. El hecho se produjo en ocasión del robo del ciclomotor de la víctima. El terrible suceso ocurrió el pasado jueves en el barrio Irigoin, de la localidad morenense de Cuartel V.
Apenas pasadas las 14 horas del jueves 24 de mayo, dos delincuentes interceptaron a un joven que se movilizaba en una moto, en el cruce de las calles Dr. Francisco Arrechavala y Víctor Hugo, en el barrio Irigoin de la localidad morenense de Cuartel V. En base a los testimonios brindados por informantes vinculados a la pesquisa, Oscar Liberona, de 21 años habría reconocido a los atracadores, ya que los mismos residían en las inmediaciones. Ante esta circunstancia, Liberona habría intentado una incipiente defensa del vehículo. La respuesta de los malvivientes no se hizo esperar: lo atacaron a golpes y uno de ellos le aplicó un cuchillazo en la espalda, dañándoles en su recorrido varios órganos vitales. Liberona cayó gravemente herido, mientras los agresores escapaban con la moto.
El barrio se convulsionó e inmediatamente familiares trasladaron al joven al hospital Mariano y Luciano de la Vega, donde finalmente falleció mientras era ingresado al quirófano. Los médicos nada pudieron hacer para salvar su vida, tal era la gravedad de la lesión recibida.
Una comisión policial de la seccional 4º de Moreno, con jurisdicción en la localidad de Cuartel V, comenzó una rápida investigación. Existían un puñado de testigos, que habrían señalado a los culpables del homicidio. Sin perder tiempo, y con la anuencia de la UFI Nº 1 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez a cargo del Dr. Federico Luppi, los uniformados realizaron una serie de allanamientos. En los operativos lograron detener a dos menores de edad. Incluso habrían secuestrado el arma con el que se cometió el homicidio: un pequeño cuchillo doméstico con manchas hemáticas, el cual es sometido a peritajes para determinar la existencia de huellas dactilares.
Los acusados cuentan con 14 y 17 años. Cuando sus edades fueron confirmadas, la causa recayó en la UFI Nº 6 del Joven, cuyo titular, el Dr. Brizuela dispuso que el adolescente de 14 años sea restituido a su hogar, mientras que su cómplice fue derivado a un instituto de menores para su internación. El expediente está caratulado como “Homicidio criminis causa”.