El homicidio se descubrió durante la tarde de este miércoles. Encontraron el cadáver de un joven cerca de la presa Roggero. Se trataba de un hombre que fue asesinado durante la madrugada de ese mismo día en Santa Brígida. Fue una ejecución, los investigadores no tienen dudas. No hay detenidos hasta el momento pero la investigación avanza.
Durante la tarde de este miércoles 31 de enero un grupo de personas que transitaban por las cercanías de la presa Roggero, en la zona sur de Moreno y donde nace el Río Reconquista, encontraron un cadáver entre los pastizales. Inmediatamente dieron aviso a la Policía.
Las fuentes consultadas indicaron que personal del Comando de Patrullas confirmó el hallazgo y que las inmediaciones fueron precintadas para permitir al trabajo de los peritos. Se trataba del cuerpo de un hombre joven que estaba con el torso desnudo, boca abajo y que a simple vista se veían al menos cinco orificios producidos por sendos balazos. La cantidad de heridas serán confirmadas en la operación de autopsia, planificada para este jueves. Los especialistas consideraron que esa no era la escena del crimen primaria, sino que el cadáver había sido arrojado en el lugar.
La Dra. Carina Saucedo, a cargo de la UFI Nº 2 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez, dispuso la intervención de la DDI. Rápidamente determinaron que se trataba de Braian Silva, un joven hombre de 30 años, quien había sido secuestrado en la madrugada de ese mismo miércoles.
Los datos que brindaron los voceros señalaron que cerca de la 1 de la mañana, este hombre fue obligado a subir a un auto cuando estaba en las cercanías de su casa, sobre la calle Don Bosco esquina 3 de Febrero, del barrio Santa Brígida de la localidad morenense de Trujui, en el límite con San Miguel.
Una vez dentro de la unidad, los testigos indicaron que escucharon varias detonaciones de arma de fuego. Acto seguido el automóvil, que contaba con el apoyo de al menos dos vehículos más, se dio a la fuga, con Silva dentro. Fue la última vez que lo vieron con vida.
Queda claro para los investigadores que se trató de un ajuste de cuentas. Una ejecución, según la mecánica. El móvil del asesinato no está aún claro. Trascendió que Silva tenía un antecedente del año 2017 por los delitos de “portación de armas y violación de domicilio”. La pesquisa se centra en las vinculaciones de la víctima y las actividades que desarrolló en los últimos meses.
A través de la visualización de las cámaras de seguridad municipales habrían determinado el recorrido de los vehículos desde Trujui hasta Moreno sur. Se sumaron a la investigación efectivos de la Comisaría 2º de Moreno (Trujui). Se esperan novedades en las próximas horas para individualizar a todos los participantes de este brutal homicidio.