A través de una carta documento enviada a las oficinas de la empresa “El Nuevo Ceibo”, la Municipalidad de General Rodríguez solicitó a la empresa prestataria del servicio de transporte de pasajeros, que retrotraiga los precios de los boletos a los que figuraban antes del aumento registrado el 21 de diciembre de 2012, dado que el mismo no fue autorizado ni convalidado debidamente por el Concejo Deliberante.
La decisión adoptada por el Departamento Ejecutivo, comenzó a gestarse luego que el dirigente de Proyecto Sur, Nicolás Cogorno, realice, a fines del año pasado, la presentación de una nota dirigida al intendente municipal Juan Pablo Anghileri, informando que el cambio tarifario no se adecuaba a las leyes vigentes.
Si bien la empresa había presentado un escrito en el Concejo Deliberante solicitando la readecuación del boleto (de $1,10 a $ 1,50), lo cierto es que la autorización legislativa nunca llegó, por lo que el aumento fue tomado, por primera vez en la historia, a través de una resolución que se firmó desde el Ministerio del Interior y Transporte a cargo de Florencio Randazzo, donde se informaba, sin muchos pormenores, que los municipios podrían adherir a la misma, dejando de esa manera, que el escrito pueda ser interpretado de diferentes maneras.
Dado que el municipio, que envió la notificación el 29 de enero, dio como plazo 24 horas para volver al cobro de la tarifa anterior, se debe consignar que al no cumplir la Línea 500 con esa solicitud, ingresó en lo que se considera una “falta grave”, por lo que no solamente pueden producirse multas, sino que también se puede llegar a una rescisión del contrato vigente entre las partes.
Dentro de la misma carta documento que llegó a las oficinas de la empresa de la calle Intendente Manny, también el municipio le solicita a la concesionaria, que presente la forma que implementará la devolución del dinero a todos aquellos usuarios que, desde el 21 de diciembre a la fecha, viajaron en los micros y pagaron el aumento asignado.
Cabe aclarar que desde que se impuso el sistema SUBE, el cambio de precio no se realiza desde la propia empresa, sino que se cambia automáticamente desde el organismo de transporte nacional. En este punto es que fundamentan su posición los allegados a “El Nuevo Ceibo”, quienes aducen, haberse limitado a llevar adelante las directivas que se enviaban desde el Ministerio del Interior y Transporte.
En este caso, desde el poder político, lo que indican es que si el sistema SUBE realizó el cambio en forma automática, lo que no se debería haber cambiado es el cobro de boletos con monedas, dado que ese es dinero que ingresa directamente a las arcas de la empresa y por ende, debe adecuarse a las normativas vigentes en el distrito.
Concejo Deliberante
Dentro de lo que es el Concejo Deliberante, la unanimidad de criterios es el pensamiento en que “El Nuevo Ceibo” está cometiendo una falta grave. Por el momento y más allá de las responsabilidades que le competen, se está manteniendo al margen del conflicto, dado que es responsabilidad del Departamento Ejecutivo actuar y hacer cumplir las normativas vigentes.
Desde el bloque oficialista del Frente para la Victoria siguen expectantes la situación. Hace varios meses han recibido la notificación desde la firma de transporte para el cambio en el precio de los boletos, pero la decisión de los concejales fue mantenerlo en estudio en el seno de la comisión.
Al no existir una presión política proveniente desde la intendencia como ocurría en otras épocas (no está en su mejor momento la relación entre Juan Pablo Anghileri y Adelma Arguissaín), los ediles oficialistas no se apuran en tomar determinaciones que, a priori, pueden significar algún tipo de costo político.
Por el lado de la oposición los cuestionamientos son más duros. Si bien el cambio de tarifa fue debatido internamente y fijaron la posición de tampoco apurar el trámite, el verdadero motivo que llevó a los bloques a ponerse firmes fue la no presentación del contrato que une a “El Nuevo Ceibo” con el municipio. Este importante escrito, según el pliego licitatorio, tendría que haberse presentado oficialmente a los pocos días de otorgar la concesión, pero por motivos que se desconocen, el mismo nunca apareció, pese a que fue solicitado oficialmente en sesiones pasadas.
“Nosotros no podemos legislar sobre algo que legalmente no existe”, dijo el concejal del radicalismo Héctor Gómez, quién adujo estar convencido de la inexistencia del convenio, responsabilizando al Departamento Ejecutivo, por todas las situaciones irregulares por la que hoy está pasando la empresa.
“El Nuevo Ceibo” evita el conflicto
Desde la empresa “El Nuevo Ceibo” no quieren entrar en conflicto con el municipio y prefieren que todo se termine arreglando a través del diálogo. Con mucho por perder y poco por ganar, lo que se intenta es que exista una salida consensuada, aunque advierten que la tarifa no será modificada.
Pablo Faluro, vocero de la firma del transporte de pasajeros de General Rodríguez, explicó algunos puntos de la controversia: “Nosotros lo que hicimos fue cumplir una resolución del Ministerio del Interior y Transporte, en la cual aumenta la tarifa con SUBE o sin SUBE. Esta resolución excede al municipio, porque es un ente superior que depende del gobierno nacional. La postura de la empresa es cumplir la Ley, por lo que ahora estamos empezando a dialogar con el municipio para ponernos de acuerdo en este tema”.
Tratando de justificar que la actitud de la Línea 500 local no fue la única que adhirió al aumento agregó: “Tenemos que decir que todas las empresas de la nación han aumentado la tarifa. Incluso esta operatoria no la realizamos nosotros, puesto que no tenemos el dominio de poder manejar internamente el sistema SUBE, sino que se configura desde el propio Ministerio del Interior. Desde allí se configuraron nuestras máquinas para que, a partir del 21 de diciembre, se comience a cobrar el incremento en el boleto”.
Haciendo un historial de los últimos anuncios sobre aumentos comentó: “Acá tuvimos otro aumento en agosto que envió el Ministerio del Interior, pero en ese caso no fue una resolución directa, sino que fue una que invitaba a los municipios a sumarse a ese aumento. En éste caso, General Rodríguez no se sumó y por ese motivo nosotros no aumentos la tarifa.
Ahora la de diciembre fue distinta, porque fue dirigida a las empresas para que apliquen la nueva tarifa, o sea no fue dirigida a los municipios para que las acepten, por lo cual lo único que hicimos fue adaptar nuestro trabajo al escrito del ente nacional”.
Sobre las presentaciones realizadas en el municipio agregó el representante de la empresa: “Nosotros hicimos una presentación en la municipalidad antes de aplicar el incremento. Adjuntamos la resolución del Ministerio del Interior e informamos que tomaríamos la decisión de aceptar lo indicado en dicho escrito. Después de ello el municipio no se expidió negando el aumento”.
Finalmente Faluro terminó diciendo: “No tenemos información acerca que peligre la concesión. Desconozco los motivos legales que puedan llevar a una situación de esa naturaleza, pero por el lado nuestro estamos cumpliendo con todas las obligaciones legales vigentes”.
