Una docena de perros aparecieron muertos durante la mañana del pasado jueves 6 de septiembre en el barrio Parque Paso del Rey. Los vecinos están conmocionados.
La mañana del jueves fue de espanto para los vecinos ubicados en la zona circundante por las calles José Ingenieros, entre Deán Funes y Vicente López y Planes. Al menos una docena de perros amanecieron muertos y sus cuerpos tirados, en su mayoría, en las puertas de las casas de sus dueños. Los animales habrían sido envenenados.
El estupor se manifestaba en la cara de los propietarios de los perros. Las declaraciones a la prensa coincidían que el hecho se produjo durante las primeras horas de la madrugada, ya que muchos de ellos creían recordar que durante la noche los animales actuaban de manera normal.
Una vecina, quien ocupa una humilde vivienda sobre la calle José Ingenieros casi esquina Remedios de Escalada, relató que cerca de las 2 de la mañana escuchó a uno de los perros gimotear. Cuando se levantó de la cama, notó que el can estaba moribundo y que una espuma verdosa salía de su boca. Con la ayuda de un familiar lo sacaron al patio, donde minutos después falleció.
Varios de los habitantes de la zona se comunicaron al servicio de emergencia 911 y a dirección de Zoonosis de la municipalidad de Moreno, pero hasta las primeras horas de la tarde de ese día ningún representante de estas entidades se hizo acercó al lugar. Los cuerpos sin vida de los animales quedaron tirados en los puntos donde la muerte los sorprendió.
Las hipótesis que manejan los vecinos eran varias, pero dos tenían más adeptos. La primera de ellas hablaba de un lugareño desaprensivo que envenenó a los animales cansado de que deambularan por las calles. Los denunciantes apuntaban a distintas personas, sin ponerse de acuerdo sobre la responsabilidad de alguna de ellas. Otra relacionaba la matanza con hechos ilícitos: para los habitantes del barrio era el paso previo para que delincuentes ingresaran en los domicilios sin la molestia que le podían ocasionar la defensa de los perros de sus hogares. Ante esta perspectiva, varios de ellos se organizaron para enfrentar esta eventualidad. El misterio aún continúa.