Germán Sibello tenía 21 años. Murió atropellado durante la madrugada del viernes 27 de noviembre cuando escapaba de una patota que intentaba golpearlo y robarle, según relatan sus amigos. Había salido de un boliche ubicado a pocos metros del lugar del hecho.
Los datos que constan en el expediente judicial señalan una mecánica de accidente que le costó la vida a un joven de 21 años. Según los papeles, Germán Sibello murió atropellado cerca de las 5.30 horas del pasado viernes 27 de noviembre en el kilómetro 33 de la Autopista del Oeste, mano a Capital Federal. Fue embestido por Ford Escort conducido por un vecino de Francisco Álvarez. Este hombre, de 34 años, quedó imputado por el delito de «Homicidio culposo» por la UFI Nº 8 del Departamento Judicial de Moreno y General Rodríguez. Luego de prestar declaración en la Comisaría 3º de Moreno (Villa Zapiola), este individuo quedó en libertad.
Pero detrás de este lamentable hecho, las fuentes consultadas contaron un suceso previo, que lamentablemente tuvo ese desenlace luctuoso.
Según los confidentes, German Sibello había salido junto a un grupo de amigos del boliche Believe, ubicado a la vera de la Autopista, en el kilómetro 33. Eran poco más de las 5 de la mañana de este viernes 27 de noviembre, bajo una intensa lluvia. Cuando comenzaron a caminar hacia la parada de colectivos, fueron abordados por una patota, armados con palos, botellas y piedras. Habrían comenzado a agredirlos. Los chicos se desbandaron, escapando en distintas direcciones. Sibello y otros jóvenes habrían cruzado el puente de la calle Graham Bell, con estos delincuentes pisándoles los talones. Sibello, junto con otros chicos, intentaron volver a guarecerse en el boliche. Para lograr este objetivo, atravesaron por la traza de la autopista y en la mano rápida del sentido a la Capital Federal, Sibello fue atropellado y murió instantáneamente.
Este caso se manejó con gran hermetismo. Trascendió que es habitual los robos a los largo de la noche contra los jóvenes que concurren a este boliche. La pregunta que nos hacemos es si la justicia seguirá esta línea investigativa para determinar las responsabilidades que tuvieron este trágico desenlace o simplemente engrosará las estadísticas de muerte en accidente de tránsito. Evidentemente, más allá de que haya fallecido atropellado, los sucesos previos al siniestro determinaron que Germán Sibello cruzara la autopista por un lugar prohibido. La seguridad de los chicos que buscan divertirse sanamente así lo demandan.