Trabajadores estatales se organizan para enfrentar ajustes y cierres por parte del Gobierno nacional

Aysa, Conicet, INCAA, Télam, Enacom, Banco Nación y la Subsecretaría de Familia que depende del Ministerio de Capital Humano son algunos de los organismos públicos que recibieron en los últimos días anuncios sobre despidos masivos para sus trabajadores; amenazas de cierre, posibles privatizaciones o planes de desfinanciamiento” por parte del Gobierno nacional. 

En este contexto, los trabajadores de diversas dependencias estatales iniciaron “planes de lucha” para resguardar puestos de trabajo que se ven amenazados ante esta medidas oficiales . 

AYSA

Los trabajadores de Aguas y Saneamientos Argentinos SA (AYSA) recibieron esta semana 300 telegramas de despidos y el gremio, de Trabajadores de Obras Sanitarias, que conduce José Luis Lingeri, se advirtió que “desde que asumieron las nuevas autoridades”, la organización sindical presentó “un plan integral para equilibrar la empresa y proteger empleos”. 

“La única respuesta fue el envío de 300 telegramas de despido. Frente a esta acción intempestiva de despidos y acciones intimidatorias a los compañeros y compañeras, el gremio llamó a un paro por 24 horas para el lunes 11 de marzo, dejando en funcionamiento sólo las guardias mínimas”, aseguraron desde el sindicato a través de un comunicado.

Lingeri explicó que el recorte de personal parte de “la falsa idea de que las gestiones pasadas han incrementado el personal innecesariamente” pero señaló que Aysa mantuvo “una dotación estable hasta 2017” que se modificó con la incorporación de 9 partidos del conurbano que dependían de ABSA. 

“Se sumaron 1000 personas a la planta permanente de la empresa por este motivo”, explicó el secretario general de los trabajadores del sector, y explicó que la gestión de Javier Milei paralizó todas las obras en marcha y esto causó “la desvinculación de más de dos mil trabajadores de cooperativas”.

Listas para privatizar

AySa forma parte del conjunto de sociedades y empresas estatales que la administración de La Libertad Avanza (LLA) pretende privatizar .

Esto mismo fue confirmado por el vocero presidencial, Manuel Adorni, quien esta semana, en una de sus habituales conferencias de prensa, aseguró que el recorte de personal tuvo como intención  “poner en valor” a la empresa para una eventual privatización.

“Es un poco como cuando vos vendés tu auto, te lo vienen a ver y se lo mostrás lavado, con chapa y pintura”, señaló Adorni al trazar una comparación entre los trabajadores de una empresa pública con un vehículo usado que se ofrece al mejor postor.

Y en ese sentido, el funcionario agregó: “Hay empresas a privatizar que hay que ponerlas en valor para hacer que funcionen de manera más eficiente”. 

“Esto no es ´que se arregle el que viene´ porque lo que va a pasar es que el perjuicio para los argentinos será mayor porque la empresa tendrá menos valor cuando se quiera concretar una venta”, subrayó.

Banco Nación

Asimismo, el propio Presidente Milei confirmó esta semana que mantiene la idea de privatizar “todo lo que se pueda”, incluido Aysa y Banco Nación.

No debería quedar nada en manos del Estado. ¿Querés detectar a un político chorro? Es el que te dice que hay que tener un Estado eficiente; no existe un Estado eficiente”, expresó el mandatario  en declaraciones formuladas al canal La Nación +. 

Tras estos anuncios, los trabajadores del Banco Nación agrupados en la Asociación Bancaria (AB) comenzaron a juntar firmas en contra de una eventual privatización e instalaron puestos a lo largo de la Ciudad de Buenos Aires y el Conurbano bonaerense como parte de una acción de protesta.

Enacom

Entre los organismos que recibieron despidos esta semana también se encontraron los trabajadores del Ente Regulador de las Comunicaciones (Enacom).

El sindicato de la Unión del Personal Civil de la Nación (UPCN) se declaró el pasado martes en “estado de asamblea y alerta permanente” por los despidos de trabajadores del Ente Regulador y exigieron una reunión de carácter urgente con el Interventor del organismo Juan Martín Ozore para “resolver la pronta reincorporación” de los cesanteados.

Incaa

En tanto, los trabajadores del Instituto Nacional del Cine Argentino (INCAA) advirtieron a esta agencia que el gobierno prevé un “vaciamiento sin precedentes en la industria cinematográfica nacional”. 

El flamante titular del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA), Juan Carlos Pirovano, anunció el jueves el cierre de las plataformas digitales y televisivas que proyectan películas nacionales, confirmó que no brindará más apoyos a festivales de la industria cinematográfica nacional, venderá el histórico cine Gaumont y sumará más despidos a los 170 dispuestos en esa área.

Pirovano anunció tales medidas durante una reunión que el funcionario mantuvo con la Junta Interna de ATE en el INCAA. 

Inmediatamente, el gremio calificó ese paquete de ajuste como “una declaración de guerra a todo el cine nacional” y se declaró en “estado de alerta y movilización”.

El encuentro había sido pactado por pedido del gremio, que propuso encontrarle una solución al anunciado despido de 90 trabajadores que desarrollan tareas habituales en el organismo y a otros 80 que integran los comités y son tutores de proyectos. Pero la respuesta fue peor.

Según un comunicado de la Junta Interna, Pirovano “negó rotundamente la posibilidad de dar marcha atrás con la medida” con el argumento de que el INCAA destina más del 60 por ciento de su presupuesto en sueldos.

Luego “enfatizó su pretensión de continuar en una segunda etapa con nuevos despidos de planta transitoria, retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas para la planta permanente”, añadió el texto.

Ante ese anuncio de vaciamiento, siempre según el relato del gremio, se le propuso gravar las plataformas de difusión de material audiovisual nacional a fin de generar fondos para el organismo, pero la respuesta generó aun más incertidumbre entre los trabajadores.

“¿Por qué tener un canal de televisión y una plataforma?”, habría dicho Pirovano en alusión a plataformas como Cine.ar y Cine.ar Play, y planteó la eliminación de esos canales. 

Entre las medidas también estaría cerrar los programas de apoyo de financiamiento de producciones nacionales y la clausura y venta del tradicional Cine Gaumont, uno de los pocos cines que dedica su proyección exclusivamente a cine nacional. 

“El actual presidente del INCAA enfatizó su pretensión de continuar en una segunda etapa con nuevos despidos de planta transitoria, retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas para la planta permanente”, explicó en diálogo con SomosTélam el delegado de ATE en el instituto Nicolás Vetromile. 

Conicet

El Conicet tuvo esta semana un respaldo por parte de 68 premios nóbeles que firmaron una carta en dónde aseguraron que “el sistema científico argentino está en riesgo”.

“Vemos con preocupación la eliminación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, el despido de empleados administrativos del Conicet y otros institutos y la terminación anticipada de muchos contratos. Tememos que Argentina esté abandonando a sus científicos, estudiantes, y futuros líderes de la ciencia”, subrayan referentes mundiales de la medicina, química, física y economía. 

El vocero presidencial aseguró estar “sorprendido” por la carta y aseguró que el organismo realizó “investigaciones de dudosa calidad”. 

“Se está construyendo un Conicet que pone sus esfuerzos en el desarrollo de la bioeconomía o en la Inteligencia Artificial aplicada a la medicina y no en uno que gasta su tiempo y recursos en investigaciones de dudosa utilidad como aquel que abordaba la orientación sexual de Batman”, aseguró el portavoz.

SENAF

También hay gran preocupación por parte de los trabajadores de la ex Secretaria Nacional de Niñez, Adolescencia y Familia (SENAF), renombrada como Subsecretaría de Familia, gracias a que se dieron de baja los contratos de 64 trabajadores en áreas críticas que perjudicaron a niños y ancianos de llamadas “áreas críticas”: 

“Hay una falta de definición de políticas públicas para garantizar los derechos de niños, niñas, adolescentes y adultos mayores, como así también la de sus trabajadores. Desde principio de año con la aplicación del decreto 842023 se dio la baja a 64 compañeros y compañeros de áreas críticas de asistencia directa perjudicando a la prestación diaria que reciben los adultos mayores asistidos ocho  en hogares y de niños y niñas de 45 días a cuatro años que asisten a nuestros cinco centros de desarrollo infantil radicados en zonas de alta vulnerabilidad social del conurbano bonaerense”, explicó en diálogo con SomosTélam Adolfo Dardik, miembro del consejo directivo de Ate Capital y delegado gremial de la junta interna del Senaf. 

Esto, según Dardik, impactó negativamente a las comunidades que tienen como único espacio para llevar a sus hijos a las sedes del ex Senaf, cuyos trabajadores se movilizarán la próxima semana al Ministerio de Capital Humano 

Télam

El lunes por la madrugada, los trabajadores de Télam recibieron un mail en el que se anunciaba una  “dispensa” de siete días para todo el personal, mientras la entrada a las  sedes que la agencia posee en el centro porteño eran valladas por efectivos policiales.  

“El viernes pasado el presidente anunció en cadena nacional el cierre de la Agencia Télam, de una manera macartista, estigmatizando a sus trabajadores y trabajadoras y el domingo a última hora aparecieron los dos edificios vallados”, repasó en diálogo con Somos Télam el secretario general de Sipreba Agustín Lecchi. 

Lecchi explicó que por este motivo se decidió “iniciar un acampe” para “defender el patrimonio público, la fuente de trabajo y para la agencia”. 

“Rechazamos la dispensa a los trabajadores y trabajadoras, las vallas y todo tipo de intimidación, nos parece un atentado contra la democracia que esté vallado un medio público por parte del gobierno nacional que tiene a su cargo esos medios y estamos acampando con un apoyo del movimiento obrero y muchos sectores de la sociedad que entienden la importancia de Télam”, destacó el dirigente sindical. 

Lecchi calificó como una “paradoja” que un gobierno que afirme “reducir el gasto público le esté pagando salarios a trabajadores para que no hagan nada”. 

“No tengo dudas que junto a los trabajadores de empresas del estado que buscan privatizar vamos a ganar esta pelea”, concluyó. 

somostelam.com.ar