Pese a tratarse de una sesión casi técnica y donde los números tienen prioridad, el encuentro legislativo para tratar el ejercicio contable 2011, tuvo momentos políticos más que álgidos. Los concejales de la oposición que hicieron uso de la palabra, Héctor Gómez (UCR) y Gastón Aguirre Mundani (FAP), hicieron duras consideraciones sobre los gastos establecidos y la manera administrativa de llevarlos adelante, por el gobierno de Juan Pablo Anghileri durante el año pasado. El oficialismo, por su parte, con Mauro García y Carlos Paz como principales referentes, contestaron las críticas y asumieron el rol defensor, desestimando las denuncias emitidas por sus colegas.
Con la ausencia de Mario Deguiz por motivos personales, el comienzo de la sesión fue con el concejal Manuel González leyendo el informe por mayoría y pidiendo directamente su aprobación.
Minutos después y dando comienzo al debate, el edil radical Héctor Gómez manifestó la oposición de todos los bloques de la oposición y para ello explicó una “negligencia manifiesta” del departamento ejecutivo en la conformación del listado de mayores contribuyentes que en su momento impidió el incremento de la tasa solidaria.
Más adelante y atento a las cuentas municipales, manifestó que según los papeles suministrados por el gobierno municipal, quedó de manifiesto la doble imposición del pago del segmento de iluminación. Cuidar que no se cobre ese monto en la boleta de Edenor y en el recibo de Tasas, “Es una responsabilidad de la municipalidad por lo que se cae en otra irregularidad”, manifestó el concejal.
Haciendo un pormenorizado análisis de las boletas observadas, Gómez puntualizó dando una serie de ejemplos de distintos proveedores municipales, que se realiza sistemáticamente un sistema de facturación para evitar el tope máximo de contratación directa. Sentenció que “Lo malo en éste caso es que no se puede establecer si el precio abonado es el mejor en plaza”. En la explicación indicó que la manera de evitar el llamado a concurso de precios, es a través del desdoblamiento de la facturación, siendo que es “El mismo producto o bien el mismo servicio con boletas correlativas”.
También Gómez hizo hincapié en algunos gastos de publicidad donde los medios no pertenecen al distrito y además puntualizó un caso donde se abonó una nota al intendente Anghileri con dinero del municipio.
Siguiendo con la misma tónica, avanzó también sobre los gastos de luces y sonidos, los cuáles el concejal radical consideró excesivos, agregando que “Creemos que sería necesario que el departamento ejecutivo evalúe la posibilidad de adquirir equipos de sonidos propios, evitando el pago a terceros y destinando ese dinero a otras áreas prioritarias para la gestión”.
Terminada las palabras de Gómez, fue el concejal de Frente para la Victoria, Mauro García, retrucó diciendo que en el caso de la facturación, la presencia de tres facturas hace que “No se esté violando la normativa vigente, por lo que la denuncia queda solamente en un juicio valorativo e interpretación subjetiva”.
Respecto a los otros ejemplos, “En ninguno de los casos se habla de una ilegalidad e inclusive se hacen sugerencias, algo que seguramente se tomarán en cuenta en caso de ser factibles de ser aplicadas”.
Ya con el micrófono en manos del concejal del Frente Amplio Progresista Gastón Aguirre Mundani hizo una explicación matemática de la recaudación, desmitificando que sea solamente el 20% la que abona sus tasas, sino que el porcentaje se eleva a casi el 58%. “Hay que desenmascarar éste artilugio que utilizan los integrantes del departamento ejecutivo para evitar hacer obras para la gente”, comentó el concejal.
Luego informó que el pasivo municipal en el 2011 era de 8 millones de pesos y al finalizar el año subió a 9,2 millones. Comentó al respecto Aguirre Mundani: “De esa deuda flotante el 60% se debe a que el municipio no paga las contribuciones patronales en tiempo y forma, es decir que mientras al trabajador se le retiene el dinero, el municipio no paga en el momento que corresponde”.
Dejando un poco el debate técnico, Gómez generó un duro cruce con el propio presidente del cuerpo Gonzalo Graña. Todo nació a raíz de un ejemplo que quiso brindar el edil opositor sobre la facturación segmentada: “Esto es igual a que si yo veo salir de un banco a un hombre con una bolsa en la mano y tiroteándose con la policía, yo voy a estar seguro que esa persona robó y esto es más o menos igual”.
Allí lo interrumpió Graña para preguntarle: “¿Usted concejal está acusando de robar? vaya a la justicia y con ese ejemplo le está faltando el respeto a todos los concejales”. A ello el concejal radical añadió: “Fue solamente un ejemplo y si usted lo toma como algo personal es por su simple interpretación”.
Más tarde y refiriéndose al bloque del Frente para la Victoria, los acusó a sus integrantes de no haber leído ni analizado la rendición de cuentas, haciendo notar que simplemente reaccionan a pedido del departamento ejecutivo. Allí quién salió a responder fue Mauro García quién dijo: “El concejal siempre subestima el trabajo de nuestro bloque, pero nosotros no solo recibimos los proyectos del ejecutivo, sino que los analizamos y tratamos de mejorarlos” agregando que “el concejal se cree el patrón de todos nosotros”.
Carlos Paz por su parte agregó: “Nosotros no menospreciamos a los integrantes de la oposición y de hecho me da terror que un radical como Gómez hable de la racionalización del estado, dado que la última vez que lo hizo su gobierno, fue para sacarle el 13% a los jubilados”.
Gómez para evitar mayores complicaciones, ignoró los dichos de sus colegas y pidió un debate directo sobre el tema y no caer en alusiones personales.
El cierre fue con algunos conceptos emanados por el presidente Graña, quién adujo que el bloque oficialista notó que todas las cuentas están dentro de la legalidad y por ese motivo acompañarán la aprobación.
Luego de casi una hora y media de debate, la posición del Frente para la Victoria logró su propósito de aprobar la rendición de cuentas por 9 votos contra 6.